La clave de Somos el Cambio, su metodología. Parte 1
Juan Romero - 5 de agosto del 2019
Diariamente, soy testigo del nacimiento de historias positivas en todo México, donde, principalmente, comunidades escolares se unen, llegan a acuerdos y desarrollan o construyen proyectos de la nada, para todos.
Y es que, Somos el Cambio es un gran compendio de todas estas historias, donde lo más importante es inspirar a otros para que estos procesos sigan creciendo de forma exponencial.
La clave de todas estas historias de cambio es una metodología de 4 palabras, que permite fácilmente y de manera intuitiva la generación de proyectos. Esas palabras son Siente, Imagina, Haz y Comparte.
Las comunidades escolares se reúnen en torno a estas cuatro palabras para llevar a cabo procesos muy básicos, pero olvidados. Lo primero es darse un tiempo todos y reunirse, así como asegurar un ambiente de confianza para poder expresarse, ya que partimos de un sentir que en muchos de los casos duele, nos incomoda, no nos gusta o simplemente nos molesta.
Así se comienza con la primera etapa, la etapa Siente. En esta etapa he visto miles de casos, pues la mayoría de las veces lo que se considera un problema o malestar para alguien, no lo es para otros o viceversa. Esto es otra de las características de la metodología: pone al participante al centro, no hay nadie mejor para describir sus inquietudes o definir necesidades que aquellos que están participando en el proceso y que se desarrollan en un entorno compartido.
Obtenemos entonces iniciativas que van alineadas a una necesidad de la comunidad. Por ejemplo, niñas y niños de un preescolar en Guanajuato querían darle unos ojos a Manuel, su compañero de salón, a ellos les preocupaba que, al no poder ver, él se llegará a perder o caer, incluso se daban cuenta de que Manuel les daba miedo a otros niños, pues no tenía ojos, y esto hacía que él se encontrara, la mayoría de las veces, solo.
Pero entonces, ¿Cómo darle ojos a Manuel?